EL CRISTO DE MIAMI
La realización del Santo Cristo de la Universidad en 2010 suscitó todo tipo de reacciones, bastantes de rechazo, a causa de la veracidad con que estaban representados en la imagen los tormentos que sufrió el Hombre de la Sábana Santa. Sin embargo, la unción profunda de su expresión icónica convenció a muchos de que estábamos ante una imagen muy real de los padecimientos que Cristo sufrió por nosotros. Por esa razón generó el deseo de obtener una copia y el profesor Juan Manuel Miñarro comenzó a recibir encargos en este sentido, el primero, de la población malagueña de Cártama, concretamente de la parroquia de San Isidro Labrador.
La actitud del escultor fue entonces y sigue siendo hoy, afortunadamente, la misma: el artista no es un fabricante de copias u objetos en serie. La imagen podrá tener las medidas del Hombre de la Sábana Santa, pero ha de ser diferente en cada caso, una obra nueva y más avanzada. Así nació la bella imagen del Cristo de la Misericordia, de Cártama Estación (2015), un Cristo vivo, que implora al Padre, con morfología sindónica y clavos en las muñecas, pero que mantiene también rasgos tradicionales de la imaginería andaluza, como la cruz arbórea o el pie derecho clavado sobre el izquierdo.
Otro tanto podría decirse del magistral Cristo de la Séptima Palabra (2015), de la basílica del Pilar, de Zaragoza. Su fisonomía es sindónica, pero rehúye a propósito la representación de la Síndone, para adentrarse en los detalles de la tanatología forense: facies precadavérica, sudoración, mirada desvanecida, realismo en las heridas. Todo ello sin olvidar la tradición de un expirante tan colosal como el Cachorro de Triana, de Francisco Antonio Gijón (1682).
Igualmente distinto es el Cristo de la Fundación (2018) de Cabra, de rasgos sindónicos, como conviene al Museo de la Pasión, que hizo el encargo. Obra excelente que escapa, sin embargo, al programa riguroso del Hombre de la Síndone, al presentarlo con cuatro clavos, el pie derecho sobre el izquierdo, junto con otras licencias que refuerzan la personalidad del artista y lo diferencian del Cristo Universitario. Todos los citados coinciden en que son crucificados vivos.
Caso diferente es el encargo de la parroquia del Corpus Christi de Miami (Florida, EE.UU.) Esta feligresía, formada mayoritariamente por población de origen hispano, de tradición católica, mantiene una Hermandad del Cristo de Medinaceli y María Santísima de la Esperanza Macarena, que tenía interés en incorporar un crucificado, sirviéndose igualmente otra copia, en este caso, la del Santo Cristo de la Universidad. El profesor Miñarro convenció a sus responsables de que no les podía hacer la copia que solicitaban, pero sí un crucificado sindónico. Finalmente se concretó el encargo, que ya es una realidad, el último de los grandes crucificados de Miñarro.
A fin de febrero han viajado a Sevilla dos de los responsables, el arquitecto Fabián Sánchez y su esposa Paula, para admirar el resultado en el taller de Miñarro. Ciertamente puede catalogarse como una versión libre del Cristo de la Universidad, el más próximo conceptualmente, pero con las licencias necesarias para introducir los avances de la investigación y evitar su clasificación como copia. Es más estilizado de figura, con largos brazos y corona de tipo diadema. Como nuestro Titular, está representado muerto, con los clavos en las muñecas y el pie izquierdo sobre el derecho. El perizoma responde al mismo concepto, pero volteado horizontalmente y con las dos moñas que tuvo el modelo en barro del universitario. En cambio, no reproduce con rigor, como el primero, las heridas por flagelo del Hombre de la Síndone.
La mayor novedad que incorpora deriva de las investigaciones del EDICES sobre el Santo Sudario de Oviedo, bajo la dirección de Alfonso Sánchez Hermosilla. Se trata de la representación de la herida correspondiente a la salida de la lanzada, por el cuarto espacio intercostal, junto a la columna vertebral y el omoplato derecho. En efecto, se ha contrastado la presencia de esa herida posmortal, tanto en la Síndone como en el Sudario.
Aprovechando su estancia en Sevilla, los responsables del Corpus Christi de Miami, Fabián y Paula Sánchez, se desplazaron hasta Córdoba el lunes 2 de marzo de 2020, para conocer la imagen del Santo Cristo de la Universidad, que les ha servido de referencia para encargar el nuevo a Miñarro. Fueron recibidos por el hermano mayor, Alberto Villar, y la vocal de Cámara, Mercedes Fernández, quienes les explicaron las características de nuestra Hermandad y su devoción por la Síndone, que pudieron también comprobar en el oratorio de la Sábana Santa. Llegada la hora del almuerzo, siguió la reunión en una cercana taberna, donde departieron acerca de las características sociales del barrio y parroquia del Corpus Christi y de la Hermandad del Cristo de Medinaceli y la Esperanza, mientras degustaban algunas de las especialidades cordobesas.
Damos gracias a Dios por la devoción creciente que observamos hacia el Santo Cristo de la Universidad en diferentes partes del mundo, capaces de generar encargos que tienen como segura referencia el modelo único de nuestro sagrado Titular. Que Él bendiga a todos los que se le acercan. Laus Deo.