Como es costumbre, la Hermandad Universitaria ha dado comienzo al curso con la Eucaristía del 14 de septiembre, fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz. Presidió la ceremonia el consiliario de la Hermandad, Ilmo. Sr. D. Manuel Pérez Moya, Deán del Cabildo Catedral y párroco de El Sagrario de la S.I.C. El acto litúrgico, al que asistieron numerosos hermanos y feligreses, dio comienzo con la oración y lectura de los himnos de laudes y vísperas correspondientes a la festividad. En la homilía destacó el celebrante tres elementos básicos de esta antigua fiesta de la Cristiandad: la exaltación, la cruz y la donación. La exaltación de Cristo elevado en el madero para salvación de los hombres significa la continuación de la Alianza con Dios, representada en el Antiguo Testamento por la exaltación de la serpiente de bronce en manos de Moisés. La cruz, como madero del que colgó nuestra Salvación, es signo de unión para todos los cristianos, sean ortodoxos o heterodoxos, católicos o protestantes; es el patíbulo del sacrificio del Cordero, sacrificio terrible sobre el que podemos meditar contemplando el Cristo titular de nuestra Hermandad. La donación es el precio de nuestra salvación, muestra del amor que Dios nos tiene y señal de cómo hemos de interpretar la muerte los cristianos: el Señor se entrega por nosotros; del mismo modo hemos de entregarnos nosotros al Señor, abandonándonos a su voluntad en un trance que no es sino el paso a la vida eterna. Tras la celebración, los hermanos tuvieron la primera convivencia del curso en la Casa de Hermandad