ESTACIÓN DE PENITENCIA 2010
El Jueves de Pasión, 25 de marzo de 2010, solemnidad de la Anunciación del Señor, la Hermandad Universitaria celebró su cuarta estación de penitencia, para adorar al Santísimo en el templo de Santa Victoria de Córdoba. El día se presentó nublado, con rachas de viento fuertes. A mediodía fue preciso cambiar el itinerario por calle Alfayatas y Cardenal González, a causa de una casa declarada en ruinas en la calle Portería de Santa Clara.
Los hermanos se presentaron puntualmente a las 18:00 horas, para proceder a la investidura de las túnicas penitenciales. A las 19:30 se celebró la Misa del Paso, presidida por el consiliario, Ilmo. Sr. D. Manuel Pérez Moya, que destacó en la homilía los valores del Misterio de la Encarnación.
A las 20:00 horas comenzó a llover débilmente, a la vez que se calmaba el viento. El pronóstico de lluvia remitido por la Agrupación de Cofradías a las 18:50 era del 30% de lluvia débil entre 19:00 y 21:00 y del 0% de 21:00 a 01:00. A las 20:55, un nuevo pronóstico daba el 10% de probabilidad de lluvia débil entre las 21:00 y la 01:00. El Cabildo de Oficiales determinó, previa conformidad de la Agrupación de Cofradías, retrasar la salida a las 22:00 y subir a Santa Victoria por el camino más corto: Plaza del Cardenal Salazar, Romero, Deanes, Conde y Luque, Plaza de la Agrupación de Cofradías, Blanco Belmonte, Ángel de Saavedra, Juan Valera, Santa Victoria. Numeroso público esperaba en la Plaza del Cardenal, a pesar de la inclemencia del tiempo.
La procesión transcurrió con solemnidad, pero a buen ritmo. Al llegar a la calle Santa Victoria, la presencia de unas ligeras gotas obligó a acelerar el paso. Se hizo la entrada al filo de las 23:00. Dirigió la oración el director espiritual, R. P. D. Jesús Daniel Alonso Porras, destacando la decisión de María para hacer la voluntad del Padre. Su ejemplo debe iluminar nuestro camino: “Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad”. Las Madres Escolapias entonaron a continuación el canto de la Salve Regina.
Al salir de Santa Victoria no llovía. Estaba previsto volver por el itinerario acostumbrado, para hacer estaciones en San Juan de los Caballeros, Jesús Crucificado, San Roque y las Filipensas. Sin embargo, la aparición de nuevo de la lluvia, aunque débil, aconsejó regresar por el mismo camino de subida. La cuadrilla de costaleros de Nuestra Señora de la Presentación, con sus capataces al frente, dirigidos por N.H. Enrique Garrido, realizó el memorable esfuerzo de llevar a Nuestra Señora en tres chicotás, desde Santa Victoria a San Pedro de Alcántara, haciendo entrada a medianoche. La Hermandad quiere agradecer vivamente a capataces y costaleros la devoción y el servicio con que han obsequiado a Nuestra Señora.
La estación terminó con el canto de la Salve y las preces por los difuntos. El Hermano Mayor agradeció a todos la compostura y llamó a considerar que, aunque Nuestra Señora había aceptado a hacer con nosotros la Estación de Penitencia, no había querido estar mucho tiempo lejos de su Hijo. Resonaban así en la mente de los hermanos los profundos versos del Stabat Mater: “Estaba en pie la Madre Dolorosa, llorando junto a la cruz, de la que colgaba el Hijo”.
La Hermandad quiere pedir disculpas a quienes otros años han honrado a Nuestra Señora de la Presentación con sus cantos y oraciones, que en éste no han podido hacerlo por las circunstancias meteorológicas: Institución Teresiana de Plaza de la Concha, Hermandad del Santo Sepulcro, Esclavas del Sagrado Corazón, Hermanitas de los Ancianos Desamparados, Hermandad del Perdón, que amablemente ofreció la iglesia de San Roque para que se refugiara la Universitaria, y Madres Filipensas.
Igualmente agradece el acompañamiento en la procesión de nuestro director espiritual, D. Jesús Daniel Alonso Porras, director del Secretariado de Pastoral Universitaria; del Hermano Mayor del Via Crucis, D. Santiago Góngora Álvarez; del Hermano Mayor del Rocío, D. Bernabé Jiménez Roldán y miembros de su Junta de Gobierno, Dª Inmaculada Sánchez Cabello, vocal de Evangelización y Juventud, y D. Rafel Fernando Millán Redondo, vocal de Protocolo; de la Universidad de Córdoba, representada por D. Juan Antonio Caballero Molina, vicerrector de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, y D. Eulalio Fernández Sánchez, decano de Filosofía y Letras.
Muy especialmente agradece el servicio prestado por el grupo de Acólitos de la Hermandad del Amor, con funciones de turiferarios y de acólitos del Preste. Y también, la presencia, un año más, de los miembros de la Tuna de Agrónomos, que actúan de servidores. Laus Deo.