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DESCANSE EN PAZ BENEDICTO XVI

Esta Hermandad Universitaria, que fue erigida canónicamente durante el pontificado de Benedicto XVI, desea expresar su dolor por el fallecimiento del Papa emérito, a la vez que encomienda su alma al Señor Dios Todopoderoso, del que fue testigo excepcional en la vida terrena, y hace votos para que la Santa Madre Iglesia reconozca pronto sus virtudes de santidad y sus cualidades magistrales como Doctor de la Iglesia.

Analizó con clarividencia las circunstancias de nuestro tiempo y denunció el relativismo moral como el cáncer que acabará destruyendo a la sociedad moderna, porque la hace incapaz de descubrir la verdad. Sus escritos son muy numerosos, destacando sus encíclicas y exhortaciones apostólicas, así como los textos motu proprio o los discursos de sus veinticuatro viajes apostólicos. Entre todos destaca por su valor catequético, la obra en tres tomos Jesús de Nazaret.

Su amor por Jesús se reflejó también en su devoción a la Sábana Santa, que tuvo ocasión de venerar en la ostensión de 2010, dejando una preciosa meditación*. Con motivo de aquella ostensión, precisamente, se organizó la peregrinación de la Hermandad Universitaria a la catedral de San Juan Bautista de Turín, para conocer y venerar tan preciada reliquia.

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https://www.vatican.va/content/benedict-xvi/es/speeches/2010/may/documents/hf_ben-xvi_spe_20100502_meditazione-torino.html.

CABILDO GENERAL DE ELECCIONES 2022

En el segundo domingo de este mes, día 11 de diciembre, a continuación de los cultos mensuales y Misa de Hermandad, se ha celebrado el Cabildo General de Elecciones, de acuerdo con la convocatoria publicada, según establecen nuestras Reglas. El acto tuvo lugar en la sacristía de nuestra sede canónica, el templo del Juramento de San Rafael. Presidió el consiliario de la corporación, Ilmo. Sr. D. Fernando Cruz-Conde y Suárez de Tangil, que rezó las preces, encomendando la sesión al Espíritu Santo. Se constituyó luego la mesa con los componentes de la Junta Electoral, NN HH Miguel Rodríguez-Pantoja Márquez, presidente, Antonio Fernández Tendero, vocal, y Ana Luján Jiménez, secretaria.

El presidente dio la palabra a la secretaria, que leyó la normativa por la que se rige la elección, que exige la presencia física de los hermanos, sin que se pueda delegar el voto ni emitirlo por correo. Concluido en su día el periodo de presentación de candidaturas, resultó presentado un único candidato, el anterior hermano mayor, Alberto Villar Movellán.

Seguidamente se procedió a la votación, siendo convocados nominalmente y por orden de antigüedad los hermanos con derecho a voto, cuyo censo es de 105. Emitieron el voto 24 hermanos, lo que arroja la participación del 23%. Terminado este punto del Orden del Día, el presidente invitó a los hermanos a abandonar la sala para realizar el escrutinio, que debe hacerse reservadamente por la mesa.

Pasados unos minutos se convocó de nuevo a los hermanos y se hizo público el resultado de la votación: 23 votos favorables y uno en blanco. Tras el aplauso de los asistentes, el presidente concedió la palabra al hermano mayor electo, quien dio las gracias al consiliario y a la Junta Electoral por su trabajo, así como a los asistentes, por haber depositado en él su confianza para un nuevo periodo, habiéndolo hecho en un día tan lluvioso y desapacible. Pidió la ayuda de todos para seguir con los proyectos en marcha, especialmente la casa de hermandad y la formación. Propuso igualmente seguir con la obra social, con la ayuda de una beca de Medicina para un estudiante de la Universidad de Bangui, en Centroáfrica, y la colaboración con ADEVIDA. Manifestó también su interés por tratar de ampliar la obra social. Para concluir informó de la permanencia de la mayor parte de los miembros de la Junta pasada y de la incorporación de los nuevos.

Cerró el consiliario animando a la Hermandad a continuar con la labor de formación, recomendando la asistencia a los cultos y el mantenimiento del espíritu de austeridad que nos distingue, tan profundo y significativo en el marco de la Semana Santa cordobesa. Terminó con las preces, dando gracias a Dios por la feliz conclusión de este proceso electoral. Laus Deo.